La bioeconomía forestal se abre paso como motor de desarrollo en las montañas aragonesas
La economía de los territorios de montaña tiene ante sí una oportunidad decisiva: la gestión sostenible de los recursos naturales como palanca de desarrollo económico, social y ambiental. Así ha quedado de manifiesto durante la jornada territorial organizada este miércoles en Huesca, en la que se han presentado los resultados intermedios del proyecto BioPirineo, uno de los 56 seleccionados a nivel nacional por la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.
El evento, bajo el título “Oportunidades de la bioeconomía en los territorios de montaña”, ha reunido a más de 50 personas y representantes institucionales para reflexionar sobre las posibilidades que ofrece la bioeconomía forestal en regiones de montaña como el Pirineo aragonés, marcado por la despoblación y el abandono de los usos tradicionales del territorio.
Una alianza estratégica por el Pirineo
El proyecto BioPirineo, liderado por ECODES en colaboración con el Instituto Pirenaico de Ecología, el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) y la asociación eco-union, apuesta por un nuevo modelo de desarrollo basado en actividades sostenibles vinculadas al sector forestal, la ganadería extensiva, los cultivos alternativos y el turismo. En la inauguración, Juan Ortiz, director general de ECODES, ha destacado que “los Pirineos son nuestra gran matriz ecológica y estratégica para Aragón por eso tenemos que sacar ese valor forestal, esa riqueza y biodiversidad. Y a la vez, reconocer el valor que aportan a nuestra economía. Su función de conservación es crítica y debemos contribuir a sostenerla”.
A la apertura también han asistido Celsa Rufas, vicepresidenta segunda de la Diputación Provincial de Huesca; Félix Romero, director de la Fundación Biodiversidad; y Ana Oliván, directora general de Gestión Forestal del Gobierno de Aragón, quienes han coincidido en la necesidad de consolidar este tipo de proyectos como herramientas clave para el equilibrio territorial.