Aragón participa en un encuentro en Bruselas sobre “la vía europea de la bioeconomía sostenible y circular”

Aragón va a estar presente en Bruselas, este lunes 22 de octubre, en el encuentro “Bioeconomía sostenible y circular, la vía europea”. Una cita en la que participan el comisionado para la Economía del Conocimiento, Fermín Serrano, y José Antonio Domínguez, director gerente del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón. La conferencia versará sobre el valor de contar con una bioeconomía sostenible y circular para mejorar la transición en un contexto de política cambiante de la Unión Europea y hacia una nueva realidad medioambiental, social y económica.

 

Sectores como agricultura, alimentación, papelería o bioenergía tienen un papel clave a la hora de apoyarse en la bioeconomía para fortalecer sus potencialidades. Así lo recuerda el comisionado para la Economía del Conocimiento, Fermín Serrano, que destaca que uno de los retos “es circularizar los procesos ante la escasez de recursos, por eso lo que avancemos nos servirá para cumplir los retos globales, como los establecidos en la Agenda 2030 y los objetivos de Desarrollo Sostenible”. Serrano señala que nos atañe a todos, desde la administración pública hasta el consumo personal, por ello se están poniendo en marcha proyectos que vayan en esa dirección como “la agenda aragonesa de innovación sostenible Ebro 2030, conjugando el crecimiento económico, ambiental y social, pero sobre todo poner en valor las oportunidades y fortalezas que tenemos únicas en Aragón circularizando esos procesos y cuidando los recursos naturales con nuevos procesos de valor añadido”.

 

Por su parte, José Antonio Domínguez destaca que la bioeconomía pese a su novedad tiene también una vertiente tradicional de la que Aragón es buena conocedora, “la bioeconomía como concepto es nuevo, pero en realidad el ser humano lo lleva haciendo desde siempre, es el poner en valor económico todo el producto de base biológica, por eso casi toda nuestra actividad es bioeconómica”. El trabajo está en ir más allá “buscar productos sustitutivos de otros de origen químico o fósiles, como serían los biocombustibles, bioplaguicidas o una combinación en la cadena de valor”. Además, el director del CITA señala que lo importante “es que el conocimiento nos apoye en la lucha contra la despoblación, uno de los retos fundamentales para Aragón”.

 

En la sesión del lunes en Bruselas se establecerá el escenario para el inicio de la discusión sobre las acciones en diferentes áreas prioritarias: apoyar la investigación estratégica y la innovación, y fortalecer el apoyo a la educación y la formación, ampliar los sectores de base biológica, movilizar inversiones, apoyar la creación de mercados, desarrollar un mejor seguimiento, fomentar la adopción, actualización y coherencia de las estrategias nacionales y regionales de bioeconomía en toda Europa con la participación ciudadana, fortalecer la comprensión y la resiliencia de los ecosistemas terrestres y marinos, seguimiento y evaluación del desarrollo de la bioeconomía.

 

La participación de Aragón en el evento muestra el compromiso para captar más fondos europeos y nuevas oportunidades en torno a la bioeconomía, un sector emergente en el que nuestra comunidad está llamada a ser una referencia internacional.  En la cita participan los Comisarios europeos de Investigación, Ciencia e Innovación, Carlos Moedas, y el de Agricultura y Desarrollo Rural, Phil Hogan.

 

El Gobierno de Aragón apuesta firmemente por la sostenibilidad y la innovación como vectores de crecimiento para Aragón. Entre otras líneas, la nueva Agenda Aragonesa de Innovación Sostenible Ebro 2030 también apuesta por la bioeconomía y por las oportunidades de diferenciación y diversificación productiva que supone para la región.

 

El Centro de Innovación en Bioeconomía Rural de Teruel

 

Europa está trabajando en la generación de un nuevo modelo económico, tomando como base el concepto de la bioeconomía y que quiere llevar a todas sus políticas en el período 2020-2030. La Comisión Europea quiere un modelo económico con menos emisiones, más innovador, que reconcilie las demandas de la agricultura y la industria con la sostenibilidad y la protección medio ambiental.

 

Desde el Gobierno de Aragón se trabaja ya en la creación de una Estrategia Aragonesa de Bioeconomía. La comunidad tiene que jugar un papel clave y beneficiarse de los avances que gracias al soporte tecnológico e innovador llegarán para mejorar la posición competitiva de nuestros sectores productivos, especialmente en lo que se refiere a la exportación e internacionalización.

 

Teruel se convierte en ejemplo europeo para el desarrollo de metodologías y modelos a exportar para el crecimiento sostenible. El Gobierno de Aragón busca reposicionar las zonas rurales como áreas de progreso y la provincia turolense cuenta con un gran potencial bioeconómico. En breve espacio de tiempo se han generado tres proyectos basados en la generación de conocimiento claves para poner a Teruel en la vanguardia del desarrollo de la bioeconomía, se trata del Centro de Innovación en Bioeconomía Rural de Teruel (CIBR)l, la Cátedra de Bioeconomía y Sociedad Tervális/Universidad de Zaragoza, y el Centro de Investigación en Biotecnología Aplicada de Suelos Fertinagro Biotech en Utrillas. 

 

El Centro de Innovación en Bioeconomía Rural, inaugurado el pasado mes de enero, pretende ser un punto de referencia en Europa. Ubicado en la Plataforma Logística de Teruel (PLATEA) quiere ser encuentro de los generadores de conocimiento y los agentes empresariales. Es un proyecto basado en la cooperación, promovido por el Gobierno de Aragón, a través del CITA y en el que se están desarrollando proyectos financiados por el FITE 15 proyectos en 2016 y otros 17 en 2017, y 2 proyectos del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA). Además, se está trabajando con la Universidad de Zaragoza, la Asociación de Truficultores de Teruel, la Cámara de Comercio de Teruel, Grupos Leader, empresas, Ayuntamientos y Comarcas. El CIBR busca abrir la puerta a una nueva forma de hacer negocios, donde la sostenibilidad económica tiene que ir acompañada de la social y medioambiental. El objetivo es poner a trabajar el conocimiento y el talento en y por el desarrollo rural de Aragón y la lucha contra la despoblación, creando herramientas y proyectos que sirvan al desarrollo rural. Todos se basan en la colaboración de los centros de investigación, con los agentes y empresas de los sectores más relevantes del complejo agroalimentario turolense (jamón, melocotón, trufa, ovino, calidad de carne de ovino y vacuno, fitosanitarios, fruticultura autóctona y de montaña, azafrán, etc.).